📝 Ingredientes
📌 Para la base:
- 140 g de galletas (tipo Digestive o María)
- 80 g de mantequilla sin sal (derretida)
📌 Para la crema:
- 3 huevos tamaño L
- 1000 g de queso crema (tipo Philadelphia) a temperatura ambiente
- 200 g de crema fresca (creme fraiche o sour cream)
- 200 g de azúcar
- 20 g de harina de trigo para repostería
- 6 g de sal
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
🍓 Para acompañar:
- Mermelada de fresas
- Fresas frescas
- Nata montada
👨🍳 Elaboración paso a paso
1. Prepara la base
- Tritura los 140 g de galletas hasta que queden finas.
- Añade la mantequilla derretida y tritura un poco más hasta que la mezcla esté homogénea.
- Usa un molde desmontable de 22 cm.
- Coloca papel vegetal en la base.
- Unta las paredes con mantequilla y enharínalas.
- Echa la mezcla de galleta y presiona bien hasta alisar.
- Hornea a 200 ºC durante 10 minutos con el horno precalentado.
2. Prepara la crema
- En un bol grande o vaso de batidora, añade el queso crema.
- Incorpora la harina y la sal. Mezcla con la pala plana o a velocidad baja hasta obtener una textura cremosa.
- Añade el azúcar, la crema fresca y la vainilla.
- Bate durante 3 minutos a velocidad media.
3. Añade los huevos
- Baja la mezcla de las paredes y añade los huevos uno a uno:
- Añade el primer huevo y bate hasta integrar.
- Repite con el segundo.
- Termina con el tercero.
- Mezcla todo bien con una espátula para asegurarte de que quede uniforme.
4. Horneado
- Vierte la mezcla sobre la base ya horneada.
- Baja la temperatura del horno a 150 ºC y hornea durante 70 minutos.
- Pasado ese tiempo, apaga el horno, abre ligeramente la puerta con un tope y deja que la tarta se enfríe así durante 1 hora.
- Después, guárdala en la nevera durante al menos 6 horas (recomendado: dejarla de un día para otro).
5. Desmolde y presentación
- Una vez fría, pasa un cuchillo por el borde y abre el molde con cuidado.
- Sirve en porciones y acompaña con:
- Nata montada bien fría
- Mermelada de fresa
- Fresas frescas
💡 Consejo final
Esta tarta mejora con el tiempo, así que si puedes, ¡prepárala el día anterior y déjala reposar en la nevera para una textura insuperable!